¿Por qué el led es nuestra mejor opción? Porque la vida útil del led es de 25 años; en cambio, las lamparillas de bajo consumo pueden durar un promedio de 5 meces,y las incandescentes apenas 1 año. Otra de las cosas que tiene a favor el led es el alto ahorro en el consumo, que no contienen mercurio y que no generan alta temperatura (solo el 10% es calor frente a un 90% de luz convencional).
Un led para cada uso
Pero antes de comprar un led hay que tener en cuenta cual va a ser su uso, ya que estos no son lámparas comunes porque tienen un dispositivo muy diferente, pero debido a su bajo consumo, su durabilidad y su resistencia a los golpes están dejando atrás al resto de las lámparas a pesar de su mayor costo.
Una vez que tengamos en claro cuál es el uso que le vamos a dar sabremos donde comprar. Si lo que queremos es poner un cartel de publicidad de gran tamaño entonces debemos ir a un estudio de diseño o de publicidad justamente. En cambio si las queremos utilizar en nuestro hogar las podemos encontrar en varios centros de ventas dedicados solo a la construcción y decoración del hogar, así como también en aquellos que ofrecen electrodomésticos y tecnología, en casas de iluminación, ferreterías y hasta en supermercados.
Es posible adquirir iluminación de este tipo a través de internet. Sitios especializados, además de otorgarnos información online, nos permiten adquirir estos productos sin movernos de casa.
Y si volvemos a referirnos a su precio, si bien son más costosos que las comunes, vale la pena su compra ya que a largo plazo el ahorro en electricidad es notable. Esto se vuelve trascendental cuando requerimos de iluminación externa para jardines y terrazas: los focos led de 10w o 15w logran iluminaciones perfectas sin consumir una energía considerable.
Sin más que decir y dejando claro que el led es el nuevo camino hacia una mejor iluminación, esperemos que esta investigación haya sido de gran utilidad para poder sacar toda duda y decidirse por una mejor calidad de luz.

Ratona de biblioteca, trabajo de correctora part-time para varios sellos editoriales. Cuanto cae en mis manos lo leo, desde un libro hasta la etiqueta del shampoo! 😛 (y por ahora no uso anteojos!)