Hoy aprenderemos sobre la leyenda del muérdago navideño, para saber más acerca de este relato que se ha trasmitido de generación en generación, desde épocas remotas hasta nuestros días.
El muérdago es un hierba o arbusto, con hojas pinchudas, de forma muy característica, y una especie de frutos pequeños salpicados de color rojo carmesí, que en épocas de navidad se dispone sobre el umbral de puertas, ventanas y/o centros de mesa, no sólo como decoración, sino como una costumbre adquirida culturalmente que nadie quiso echar por tierra hasta hoy.
El muérdago desde siempre ha sido símbolo de fertilidad (debido a su habilidad para reproducirse) y además de eternidad (por el hecho de que sus hojas se mantienen siempre verdes). Estas bondades eran atribuidas a un carácter sagrado y por tal motivo se utilizaba con fines curativos y preventivos de diferentes enfermedades. Más allá de esto se cree que quienes se besen debajo del muérdago en navidad o vísperas del año nuevo lograrán un amor verdadero y duradero, tanto como el color las hojas de esta especie vegetal.
Cuenta la leyenda…
… que cuando Baldur, Dios de la primavera, era apenas un niño, Frigga (su madre) tuvo un terrible sueño en el cual se la alertaba sobre la muerte de su hijo, y por esta razón, conmocionada por tamaña pesadilla, decidió recurrir a los cuatro elementos (fuego, agua, aire y tierra) y a todo ser viviente, para hacerles prometer que jamás le harían daño a su hijo; pero al parecer se los pidió a todos con excepción del muérdago, por considerarlo débil e inofensivo.
Baldur es el Dios Nórdico que representa la luz, lo «puro», lo bueno, lo bello de manera natural
De esto se enteró Loki, dios de la mentira y el engaño, y fue así que hizo una punta de flecha con un muérdago, único ser vivo que no fue comprometido en no atentar contra la vida de Baldur; de esta manera, éste la da muerte al niño. Frigga lloraba desesperada, desconsoladamente, y besó a su hijo para darle el último adiós; fue así que los dioses, conmovidos ante tanto dolor y semejante muestra de amor puro, decidieron devolverle la vida a Baldur, y éste, como muestra de agradecimiento y al gran amor de su madre, declaró que las parejas que se besen debajo de un muérdago perpetuarán el amor verdadero en la tierra.
Es así como surge esta tradición, por eso en estas celebraciones que se aproximan, si quieren tienen un amor verdadero, bésenlo debajo de un muérdago, y su amor durará por siempre!
Para los que no me conocen, soy experto en todas las materias de la Navidad. Confecciono regalos, viajo por el espaciotiempo, y hago el mejor delivery del mundo –y el más importante. ¿Mi nombre? Papá Noel. Aunque muchos sólo me dicen Santa.