¿Cómo quitar el óxido de mi bicicleta?

quitar el óxido de su bicicleta

La presencia de óxido de hierro en metales es una clara señal de desgaste por el contacto de este material con el agua o por acción de la humedad ambiental, lo que produce un daño de la pieza metálica que reconocemos ante la presencia de un polvillo volátil, de color tostado o marrón anaranjado, que nos indica que debemos poner manos a la obra para evitar un daño mayor que pueda resultar irreparable.

 

Esta oxidación no solo hace que nuestro rodado se vea deslucido, sino que puede perjudicar el funcionamiento parcial o total de alguna pieza de nuestra bicicleta.

 

Tomen lápiz y papel para apuntar las siguientes soluciones:

  1. Lavar la bicicleta (o las piezas oxidadas) con una solución de detergente y vinagre, con la ayuda de un cepillo para luego pasar un trapito humedecido con agua, y por último dejar al aire libre algunas horas para que se seque correctamente. Por fin tendrá la bicicleta libre de óxido!
  2. Solución de bicarbonato de sodio y limón: siguiendo los pasos anteriores.
  3. Frotar el metal dañado con un pañito con pasta dental, pasar un trapito humedecido levemente y dejar secar
  4. Sumergir las piezas o tornillos oxidados en un recipiente con bebida cola y luego quitar la consistencia pegajosa con un paño húmedo con alcohol.
  5. Pasar acetona con la ayuda de un cepillito hasta remover el óxido, y listo! No es necesario otro paso ya que este se volatiliza en minutos.

En este caso les hemos presentado métodos por demás sencillos, con sustancias o compuestos que todos tenemos en casa; pero por supuesto que existen productos comerciales específicos para quitar el óxido con máxima eficacia. Estos se consiguen tanto en tiendas multipropósito y ferreterías, como en casas de turismo aventura.

Una vez que nos hemos desecho del óxido de hierro de nuestra bicicletas debemos resguardarlas bajo techo. Si las dejaremos al aire libre es fundamental cubrirlas con una funda de nylon gruesa u otro material impermeable que las preserve de los agentes dañinos.

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