La playa es un lugar increible, pero sin dudas se encuentra asociado a distintos riesgos (el mar, la arena, ¡y no nos olvidemos del sol!). Por eso, a continuación les detallaremos algunos cuidados y precauciones que deberemos tomar para que nuestras vacacionen transcurran sin sobresaltos!
A saber:
- No dejar que los niños se acerquen solos al mar, aunque lleven salvavidas o sepan nadar, porque el oleaje puede tumbarlos o arrastrarlo irremediablemente.
- Si estamos en la arena intentar no circular descalzos, pues puede haber algunos vidrios u otros materiales cortantes que pudieran causarnos alguna lesión cutánea en los pies.
- Tener precaución respecto al calor excesivo, y no exponerse al sol durante la hora de la siesta, pues esos rayos son perjudiciales para nuestra salud.
- Hidratarse correctamente, aunque no tengamos sed, pues el calor excesivo nos hace perder mucho líquido, pudiendo derivar en un cuadro de deshidratación, sobre todo en los niños que son más lábiles a las perdidas hídricas en épocas estivales.
- Utilizar siempre protector solar, preferentemente con factor de protección (fps) mayor a 70, y en niños de 90 o 100.
- Utilizar gorros, sombreros, para evitar hipotensión arterial inducida por las altas temperaturas.
- Proteger nuestros ojos de la alta reflexión lumínica, del sol sobre la arena, con gafas oscuras de buena calidad.
- No consumir alimentos mal refrigerados, ya sea de vendedores ambulantes, puestos playeros, e inclusive los que llevamos nosotros mismos en la conservadora de alimentos portátil.
- Utilizar ropa de colores claros, ya que los colores oscuros absorben un mayor espectro de luz, y en consecuencia nuestro cuerpo más energía en forma de calor.
- Antes de meterse al mar si este está muy frio, primero mojarse con las manos, para evitar el choque térmico que puede derivar en una descompensación.
- Vigilar a los niños atentamente, pues ellos en un minuto están en la otra punta, tanto para evitar que se extravíen, y/o prevenir cualquier tipo de accidentes. Si hay muchos niños que controlar repártanse esa tarea, y cada adulto vigile a uno o dos, no más!
Tomen debida nota de estas precauciones para disfrutar a consciencia y sin riesgos la belleza de la playa.
Y recuerden: la prevención nunca está de más.

Soy licenciada en nutrición con master en alimentación natural y macrobiótica. Colaboro en diversos medios impresos para educación social alimentaria y prevención de la desnutrición. Además escribo sobre estética y ciertos temas de interés médico asistencial, mi segunda gran pasión! Soy fanática de los delfines y ballenas.