El eczema marginado de hebra no es más ni menos que un tipo de micosis superficial producido a causa de hongos, específicamente dermatofitos, también llamado tiña. Estos son producidos por la colonización de la capa cornea de la piel, sobre todo en las zonas de grandes pliegues, tales como ingles, axilas, área sub mamaria, entre otras.
Las características de los signos visibles son lesiones eritemato-escamosas (rojizas e irregulares), de bordes bien definidos, con el centro en un tono más claro, con micro vesículas y costras cuyos límite se extienden periféricamente. Su forma es ligeramente discoide, con bordeado de mayor textura y de color rojo más vivo.
Uno de los síntomas más molestos es el picor intenso en la zona afectada, que intranquiliza a los pacientes alterando sus horas de sueño y el desarrollo de su vida normal.
La localización más frecuente en el caso de los hombres es la ingle, donde por lo general suele extenderse hasta los testículos, zona muy sensible, que ante la picazón resulta intolerable.
En el caso de las mujeres el área más afectada suele ser debajo de las mamas, ya que es una zona de calor y extrema humedad, ideal para la proliferación de los hongos oportunistas causantes de esta dermatitis de hebra.
Esta alteración de etiología micótica, a nivel dérmico, se puede abordar desde diferentes estrategias terapéuticas, entre ellas:
- Tratamientos de uso tópico: donde los más recomendados son las cremas con óxido de zinc y cobre. Conocidas como pasta al agua, son realmente eficaces siempre que se siga al pie de la letra la indicación médico-dermatológica.
- Farmacos orales: antimicóticos varios.
- Ungüentos fungicidas: que por lo general se preparan en laboratorios según indicación médica.
La duración del tratamiento dependerá de cada caso en particular, según el grado de compromiso dérmico, la celeridad de la consulta médica, y el apego a la terapia indicada por parte del paciente. Se recomienda higienizar el área y seguir las sugerencias clínicas con la frecuencia precisada por el profesional a cargo del tratamiento, para mejorar el pronóstico y evolucionar oportunamente.

Soy licenciada en nutrición con master en alimentación natural y macrobiótica. Colaboro en diversos medios impresos para educación social alimentaria y prevención de la desnutrición. Además escribo sobre estética y ciertos temas de interés médico asistencial, mi segunda gran pasión! Soy fanática de los delfines y ballenas.