Los cuidados para la diabetes, sus controles y precauciones, son fundamentales para convivir con esta patología, con su sintomatología integral, y para que el paciente desarrolle su vida y sus actividades con la mayor normalidad.
La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por una alteración del metabolismo de la glucosa, en donde esta aumenta en la sangre a niveles mayores de 126 miligramos cada 100 dl en ayunas (hiperglucemia). Esta enfermedad se desencadena por una falta total o relativa de la insulina, que es la hormona encargada de favorecer la entrada de la glucosa a las células, para que estas puedan realizar todas sus funciones vitales. Puede darse por causas genéticas, por mal funcionamiento del páncreas, o adquirirse por algún problema sistémico, como por ejemplo defecto de los receptores celulares para reconocer a la insulina. (ver también: ¿Qué es la diabetes?)
Esta puede generar diferentes complicaciones. Entre las más significativas se hayan las vasculares y neuropáticas (del sistema nervioso encargado de la trasmisión de impulsos nerviosos), sobre todo a nivel de extremidades inferiores y la retina. Además puede agravar entre dos y siete veces el peligro de padecer enfermedad vascular del corazón o encéfalo.
Los controles son fundamentales, sobre todo si se trata de diabetes tipo 1, denominada insulinodependiente porque depende de la insulina exógena para evitar las descompensaciones metabólicas como la acidosis, e inclusive la muerte.
En estos casos se recomienda:
- Respetar a raja tabla el esquema de inyecciones y los horarios establecidos por el medico diabetólogo.
- Se debe tener un monitoreo continuo de los valores de glucemia para poder corregir en caso de ser necesario y normalizar posibles mediciones anormales.
- Al inyectar hacerlo en las debidas condiciones de asepsia.
- No sumistrarse insulina en caso de estar en ayunas, ya que esta requiere sustrato para ejercer su acción.
- Acompañar el tratamiento con un plan de alimentación adecuado.
- No suministrarse más insulina de la indicada.
- Utilizar el tipo de insulina prescripta por su medico, y no otra.
En los casos de diabetes tipo 2 o no insulino-dependientes:
- Seguir un plan de ejercicios y de alimentación especialmente diseñado.
- Tomar antidiabéticos orales en las dosis y horarios indicado por su medico.
- Mantener un peso corporal saludable.
- Ver también: Cómo prevenir la diabetes tipo 2.
Debido al alcance de las complicaciones de dicha enfermedad, que tiene como órganos blancos a los miembros inferiores y a la vista, se recomienda:
- Controlar los pies, mantenerlos limpios y libre de hongos para evitar infecciones que pueden en casos severos hasta derivar en amputación.
- Hacerse fondo de ojo una o dos veces por año, para descartar daño a nivel de la retina.
Hoy en día la diabetes es una complicación perfectamente controlable. Si se siguen las indicaciones médicas pertinentes pueden tener una satisfactoria calidad de vida.

Soy licenciada en nutrición con master en alimentación natural y macrobiótica. Colaboro en diversos medios impresos para educación social alimentaria y prevención de la desnutrición. Además escribo sobre estética y ciertos temas de interés médico asistencial, mi segunda gran pasión! Soy fanática de los delfines y ballenas.