Si bien entre báscula y balanza existen diferencias técnicas y conceptuales (una mide el peso y la otra masa y peso), la práctica casi las ha sinonimado y la diferencia se ha transformado en cuestiones de género-especie o de grados (unas para grandes escalas y las otras para objetos de menor peso). Lo cierto es que son instrumentos para el pesaje de los cuerpos.
Se han desarrollado a la par de las economías, pues las industrias, justamente, necesitan cada vez más precisión y más prestaciones en las operaciones de pesaje. Este crecimiento notable puede detectarse en dos ejes: la calidad de las mediciones (cada vez más precisas) y la adaptabilidad a las necesidades de cada sector.
Tipos de básculas y balanzas industriales
Según su mecanismo de funcionamiento podemos encontrar básculas mecánicas (con contrapeso de palancas -se trata de una medición indirecta de masas, hoy casi extintas; por deformación elástica o de “muelle elástico” , entre otras); y electrónicas o de tecnología digital (tanto en el mecanismo interno como en los indicadores de peso y en los software para balanzas industriales), compuestas por células de carga que proyectan el peso por resistencia eléctrica, y que fundamentalmente no requieren operador.
El listado siguiente, en absoluto taxativo, nos permite conocer algunas de ellas de acuerdo a sus prestaciones específicas:
- Básculas de almacenes: son utilizadas para pesar alimentos y mercancías de todo tipo. Presentan gran variedad es sus capacidades de medición.
- Pesar camiones y trenes: de amplia difusión en países con un flujo de mercancías terrestre. Este tipo de balanzas industriales se caracterizan por permitir grandes pesajes sin necesidad de descarga de mercaderías y sin interferir demasiado en los tiempos del fletamento.
- Electrónicas de precisión: son básculas industriales específicas, también conocidas como balanzas analíticas, para empresas que necesitan exactitud y precisión en los pesajes, como la farmacéutica, entre otras. Permiten, esencialmente, utilizar distintos sistemas de unidades de peso y altísima incertidumbre.
- Bulk Weighting: balanzas para pesaje continuo de mercancías a granel, a través de tolvas interconectadas (conocidas también como básculas de tanques). Muy utilizadas en la industria agrícola, proporciona un mecanismo de cálculo de peso y parcelación de la mercadería. Es decir, no solo puede pesar cantidades de granos (por ejemplo), si no que los raciona para su carga directa y transporte o almacenamiento.
- Báscula de Aero-riel: fácilmente colgables y adaptables a geografías que no permiten la utilización de balanzas convencionales de suelo. De similares características se encuentran las balanzas para puente grúas, que permiten la movilidad de las mismas sin necesidad de trasladar la mercadería.
- Balanzas industriales para ganado en pie: el crecimiento de la industria agropecuaria ha determinado la evolución de este tipo de instrumentos, que brindan alta precisión aún con movimiento del animal. En países agrícola ganaderos este tipo de instrumentos se ha desarrollado de manera extraordinaria, tanto para aportar precisión como para imponer velocidad al proceso.
Extenso es el listado, pero vale mencionar (para tener una idea de la especialización de esta técnica de pesar) las básculas en U, de barras, para fosos, de zorras y carros; balanzas industriales de peso dinámico, de cubiertas, para líquidos, para zonas hostiles (con cubierta anti viento, por ejemplo), para montacargas, balanzas industriales de blanco, para palets, multifunción, etc.
El avance tecnológico nos permite encontrar básculas y balanzas industriales específicas para todo tipo de usos y condiciones, con una amplísima gama de prestaciones y en todas las escalas imaginables.
Con esto se ha podido controlar las variables que rodean a la tarea de pesar objetos (humedad, presión, etc) y que permiten que podamos continuar la premisa griega de “dar a cada uno lo que es justo y necesario”.

Ratona de biblioteca, trabajo de correctora part-time para varios sellos editoriales. Cuanto cae en mis manos lo leo, desde un libro hasta la etiqueta del shampoo! 😛 (y por ahora no uso anteojos!)


