
Los sistemas de protección y la tecnología al servicio de la seguridad avanzan a paso acelerado en este mundo cada vez más complejo. Pronto, las llaves metálicas que nos acompañan desde que existen las puertas serán objetos de museo, y a nuestros hijos no se les ocurriría nunca llevar en el bolsillo un bulto tan pesado y ruidoso. Hoy ya disponemos de variados tipos de cerraduras biométricas para que nuestras puertas se transformen en una barrera comparable a lo que en otros tiempos sólo veíamos en películas de ciencia ficción o espionaje. Se trata de cerraduras electrónicas, infranqueables por métodos convencionales y con el poder de esta suerte de ‘escudo protector’ que la tecnología de última generación ha puesto a nuestra disposición para preservar nuestros hogares, oficinas y fábricas.
¿Qué son las cerraduras biométricas y por qué son tan convenientes para nuestros accesos?
Las cerraduras biométricas son sistemas de seguridad electrónicos basados en la «métrica de nuestra biología» (de allí su nombre). Su diseño es el resultado de la ingeniería aplicada a la lectura de nuestras características únicas biológicas. La electrónica se une a la metalurgia logrando productos de vanguardia, eficaces pero a la vez elegantes, que elevan los cerrojos a un sitio superlativo en lo que a seguridad y resguardo se refieren. Para entender su conveniencia basta reflexionar en que el tiempo es un factor decisivo, pues buscar las llaves, introducirlas y girar para abrir una puerta demanda demasiados segundos en cuanto a seguridad refiere. Estos sistemas, en cambio, permiten accesos inmediatos, reduciendo por mucho el intervalo crítico (tiempo donde pueden asaltarnos) que implica acceder a cualquier estancia.Biometría quiere decir ‘medición biológica’; es decir que nuestros atributos físicos, únicos e irrepetibles, funcionan como una llave humana, «la llave de todas las llaves».
Diferentes clases de cerrojos electrónicos biométricos según tecnología:
1. Lectura de las huellas digitales
Estos cerrojos están constituidos por un escáner capaz de identificar los infinitos e imperceptibles patrones de surcos y bifurcaciones de nuestra huella dactilar, única para cada ser humano que haya existido en el mundo (vale decir que ni siquiera hermanos gemelos poseen las mismas huellas dactilares). Esta lectura óptica escanea la yema de un dedo de manera certera, dinámica y efectiva, y en un tiempo menor a un segundo.
2. Reconocimiento facial

3. Reconocimiento por voz

4. Biometría vascular

5. Biometría del movimiento
Si todo lo leído hasta ahora no te ha dado una sensación de ciencia ficción, esto sí lo hará: aunque parezca sorprendente, los movimientos que hacemos al caminar, el balanceo, la distancia entre un paso y el otro, el movimiento de los hombros y las caderas pueden ser identificados por un programa y reconocidos como patrón personal. Los nuevos sistemas que combinan escaneo de movimientos con reconocimiento facial son rápidos y, además, mejoran con el tiempo de uso (cruzar un escáner corporal de estos para penetrar un edificio cada día va mejorando progresivamente su velocidad de identificarnos a distancia). Sí: estos sistemas prometen reconocer nuestra proximidad cada vez a mayores lejanías.
6. Reconocimiento del iris

Conclusión
La tecnología enfocada en la seguridad de nuestros hogares ha dado pasos importantes, y todo indica que esto no terminará aquí. Nuevas empresas están invirtiendo en estudios biométricos, lo que en un futuro implica nuevos competidores, precios más bajos para el consumidor, y prestaciones cada vez más rápidas y precisas. Bajo la premisa «tu cuerpo es la mejor llave», las innovaciones que aparecerán en los próximos años resultarán increíbles, de seguro inimaginables para el presente. Mientras tanto, los reconocimientos biométricos se emplean cada vez en mayores contextos, facilitados por la velocidad de proceso que tiene hoy día hasta un común teléfono móvil. Los seguiremos informando.Soy profesor de educación media al cual le gusta abrir y reparar cuanto objeto no funcione (aunque luego me sobren tornillos!) 🙂 Tengo una fascinación por los deportes acuáticos, y algunos veranos atrás trabajé de socorrista en las playas de Barcelona (muchas anécdotas). En infotopo principalmente colaboro con notas deportivas y técnicas, como aspirante a geek que soy.



