Se llaman zeolitas a un grupo de minerales cuya particularidad porosa les permite absorber líquido en gran cantidad, y eventualmente liberarlo. Cuando un elemento posee gran cantidad de poros microscópicos, su superficie real aumenta, confiriéndole grandes aptitudes de captación (imagínense una esponja). En este punto, la zeolita, o ceolita, se compara con el carbón activado, y se la emplea con fines similares cuando de desintoxicación del organismo se trata. Veremos eso más adelante en la misma nota.
¿Cómo se origina la zeolita?
Las aproximadamente 40 clases de zeolita natural tienen su origen en las erupciones volcánicas. Existen 160 clases sintéticas, también (es decir, fabricadas en laboratorios).
La común piedra pómez, una prima cercana de la ceolita, es también de origen volcánico, y por su porosidad es común emplearla como abrasivo (por ejemplo, para limar las durezas de los pies).
Usos industriales
Principalmente, su uso industrial se ubica en la petroquímica (proceso de refinamiento de petróleo). Para este fin, se emplea ceolita mejorada (sintética). Por su capacidad de absorción de metales pesados y bacterias también se la emplea para purificar agua contaminada. Otro de sus usos extendidos es en la fabricación de detergente.
Sus propiedades también la hacen participar en procesos industriales diversos donde se necesite purificar aire, agua, quitar malos olores. Absorbe los aceites y sirve para separar gases.
Zeolita y cultivos
En horticultura, la ceolita aparece como aliado de viveros, en la selvicultura (plantaciones masivas de árboles), en la parquización y en el mantenimiento de invernaderos. Como retiene el agua y los nutrientes, es un elemento útil para ayudar a crecer nuestras plantas: impide que la tierra se apelmace (favoreciendo el drenaje y la generación de nitrógeno), a la vez que mantiene a raya posibles intoxicaciones de la tierra.
Usos de la zeolita en el cuerpo con fines medicinales
La clinoptilolita, una de las clases de piedra zeolita natural, es ingerida para aprovechar sus propiedades absorbentes dentro de nuestro organismo. Se considera que es capaz de capturar las toxinas (incluyendo residuos plásticos y metales pesados), y por ende fortalecer el sistema inmune, lo que reduce el riesgo de tumores, alergias e inflamaciones.
Muchos médicos naturópatas la creen capaz de aportar energía, mejorar la conciencia y la sensación de bienestar. También se la emplea como un antiácido, y se la investiga para tratar ciertos cuadros oncológicos, de diabetes y hasta de quemaduras graves.
Como siempre mencionamos en este tipo de notas, no se recomienda ingerir ceolita sin la guía de un profesional, mucho menos ocultar su ingesta a cualquier médico. Ante la duda, escríbenos en los comentarios.
Soy licenciada en nutrición con master en alimentación natural y macrobiótica. Colaboro en diversos medios impresos para educación social alimentaria y prevención de la desnutrición. Además escribo sobre estética y ciertos temas de interés médico asistencial, mi segunda gran pasión! Soy fanática de los delfines y ballenas.