Cuidado del riñón: peligros, alimentación, consejos, desintoxicación

consejos para cuidar tus riñones

Los riñones son dos órganos que tienen la función de limpiar la sangre de ácidos e impurezas haciendo uso de filtros especializados llamados nefrones. Los riñones eliminan los desechos (vía orina) y controlan la cantidad de líquido de tu cuerpo. Por si fuera poco, mantienen el equilibrio de sales y minerales para que todas tus fibras funcionen sin problemas. El cuidado del riñón es, entonces, indispensable para asegurarnos la calidad de vida. En esta nota voy a decirte cómo preservarlo, sanarlo, y, además, voy a contarte qué atenciones extras hay que prestarle en la tercera edad.

Consejos para tener los riñones sanos

  1. Controla tu peso. La obesidad significa, entre otras cosas, más trabajo para tus riñones. La obesidad temprana aumenta muchísimo el riesgo de contraer, eventualmente, enfermedad crónica del riñón. Haber sido gordito en cualquier momento de tu vida (o durante la mayor parte del tiempo) ha producido un desgaste del riñón que podría derivar en enfermedades crónicas. Así que cuida tu silueta, por favor.
  2. Mantente hidratado, pero a base de agua pura, filtrada. Reduce otro tipo de bebidas al mínimo (sobre todo, evita el alcohol).
  3. Ingiere elementos ricos en Vitamina D. Ejemplo de éstos son los huevos y los pescados (en particular las truchas, las sardinas, las anchoas y el salmón rosado). Los langostinos también tienen cantidades altas de vitamina D. Si eres vegetariano o vegano (tanto como si no), consume champiñones, y bebe leche de soja. Si te gustan los cereales, busca los fortificados con vitamina D. Y siempre toma un poco de sol (el sol es indispensable para fijar la vitamina D, así que están avisados).
  4. Escápale al azúcar. Usa estevia, por favor. Limita —o directamente intenta no comer— golosinas, ni beber bebidas gaseosas, porque tienen una cantidad de azúcar inconcebible.
  5. Limita la sal. Si no puedes (mejor dicho no quieres) comer sin sal, procura comprar sal marina y no sal refinada. Contrólate la presión cada tanto, pues la presión alta daña paulatinamente los riñones (y el resto de los órganos) sin que te enteres de tu hipertensión.
  6. Esto debería resultar una obviedad en los tiempos que corren: en tu dieta debe haber muchas frutas y verduras frescas, siempre.
  7. Realiza actividad física (otra obviedad). Como mínimo, camina media hora, cinco veces por semana. Eso es, como dije, lo mínimo; si realizas más actividades deportivas, mucho mejor.
  8. Tanto las Naciones Unidas como la Organización Mundial de la Salud se pusieron de acuerdo en esto: complementa tu comida con espirulina. Para los que no la han oído nombrar, se trata de una microalga a partir de la cual se fabrican comprimidos de venta libre. Puedes conseguir complementos de espirulina en farmacias y droguerías.
  9. ¡No fumes! La nicotina y el alquitrán del tabaco entorpecen el paso de la sangre por los riñones. Este desequilibrio, con el tiempo, daña el funcionamiento normal del riñón. En el caso de que esto te parezca leve, las estadísticas indican que el cigarrillo incrementa el riesgo de cáncer de riñón en un cincuenta por ciento. Si estabas reuniendo razones para dejar de fumar, ahora ya tienes una nueva.

¿Cómo limpiar mis riñones?

Para desintoxicar los riñones, te recomiendo tomes nota de los siguientes consejos:

  1. Bebe agua regularmente.
  2. Prepara té de jengibre, o incorpora esta raíz a tus platos. La comida peruana, por ejemplo, y la asiática del sudeste emplean jengibre en una cantidad extensa de recetas.
  3. El perejil, tanto como su hermana el cilantro (coriandro), son hermosos elementos desintoxicadores. Úsalos en ensaladas y platos (nuevamente, las gastronomías peruana y del sudeste asiático emplean cilantro regularmente).
  4. Beber jugo de limón (puede ser en forma de limonada, pero, recuerda, ¡sin azúcar! ¡Emplea estevia si deseas endulzar!).
  5. Comer arándanos. Puedes agregarles un yogurt natural e incluso cereales para dar forma a un excelente desayuno «detox». También se comercializa el jugo de arándanos, y, de hecho, este fruto se ha vuelto una moda en todo el mundo gracias a sus propiedades antioxidantes.

Las enfermedades del riñón suelen ser irreversibles, así que es mejor para tu bien que hayas concientizado los consejos que aquí se recomiendan.

Cuidados de los riñones en la tercera edad

Debemos saber que, en la medida en que envejecemos, nuestros riñones se debilitan y pierden funcionalidad. La palabra clave aquí es «control«: realizarnos estudios anuales. Un test de orina basta para detectar tempranamente problemas en el riñón. Esto es indispensable si existen antecedentes familiares de diabetes, presión alta y/o piedras en los riñones.
Entre los cuidados generales ya mencionados podemos agregar:

  1. Verificar si los remedios que se consumen resultan nefrotóxicos (ya dijimos que los riñones tienen nefrones para purificar la sangre). Entre los remedios nefrotóxicos encontramos la aspirina, los antibióticos, los medicamentos para la osteoporosis y los analgésicos (como el ibuprofeno). Ante la duda, consulta con tu médico.
  2. El flúor del agua potabilizada genera desgaste en el riñón. Lo mejor es beber agua mineral que no contenga flúor, o bien agua filtrada.
  3. Evitar (o limitar) la cafeína. Recuerda que el té y la yerba mate (que se bebe en algunas regiones de América del Sur) también tienen cafeína. La cafeína tiene un efecto diurético, y por ende fuerza los riñones y deshidrata el organismo.
  4. Mantener la hidratación corporal con aproximadamente seis vasos de agua por día.
  5. Intentar mantener cierta actividad física. Puedes encontrar actividades físicas saludables para la tercera edad aquí.
  6. Llevar una dieta balanceada, y no abusar de la comida proteica (carnes, quesos).
  7. No comer con sal (y ojo con las conservas, la comida enlatada y los embutidos, que tienen sal para aumentar su sabor).

Recuerda: la clave para mantenernos saludables es el descanso placentero, el aire fresco, un poco de sol, una dieta abundante en vegetales, y siempre, pero siempre, mantenernos activos. No solamente cuidaremos así nuestros riñones, sino nuestro organismo entero.

2 respuestas

  1. Hola Eliana. Me sirve mucho el comentario sobre la salud del riñón. Ya tengo 80 años y al parecer todavía estoy bien en esto. Sin embargo, estoy comenzando un tratamiento homeopático de los Laboratorios Gleser para la próstata, y leyendo su contenido veo que contienen conium maculatum, sabal serulata y pulsatilla negricans. Al investigar en internet veo que el conium es venenoso, y la pulsatilla negricans no es para esto, entonces estoy algo preocupado, pues no sé si esto estará bien. Ojalá me puedas apoyar con alguna buena sugerencia.

  2. Hola Francisco. Es cierto, el conium es tóxico pero no es la primera vez que en homeopatía se emplea un elemento peligroso para producir un alivio o una sanación. Por ejemplo, el veneno de las abejas se emplea para tratar ciertos cuadros. Hay una zona gris en la homeopatía y por eso no es mundialmente aceptada en todos los países. Mi sugerencia es que visites a un homeópata recomendado pues, según tu organismo como un todo, podrá evaluar y en todo caso rectificar el tratamiento. De cualquier manera te comento que las dosis de los elementos son bajas, y supuestamente mantenidas dentro de la tolerancia humana. Pero, insisto, una consulta homeopática profesional es lo indicado.
    Besos, suerte, y gracias por el comentario 🙂

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